Sequedad nasal debida a agentes climáticos como ambientes secos (calefacciones, aires acondicionados, aire frío), polen, humo...
Sequedad nasal de origen idiopático.
Coadyuvante en tratamientos farmacológicos que causan sequedad.
Sequedad asociada a ciertas patologías: rinitis seca, perforación y desviación septal, rinitis medicamentosa o química (abuso de descongestionantes, drogas, alcohol o tabaco).
Sequedad asociada al envejecimiento.
Sequedad debida a infecciones víricas.
Mucosas afectadas por sequedad, pequeñas lesiones, heridas o costras.